Urge cambiar modelo de distribución y consumo de agua

La ciudad de Los Mochis amaneció este lunes con baja presión en el servicio de agua y en algunos sectores de la ciudad el vital líquido está saliendo a cuentagotas de las llaves.

Aquella ciudad que presumía tener uno de los mejores sistemas de agua potable del país y en donde se podía consumir el líquido directamente de la llave, hoy sufre las consecuencias de un crecimiento mal planeado, la falta de mantenimiento de su infraestructura y el importamadrismo de una clase política que ha usado como caja chica y botín electorero a la JAPAMA y a los llamados módulos de riego.

Ahora se responsabiliza a la Red Mayor y al Módulo de riego Taxtes de dejar sin agua a la ciudad, quienes, efectivamente, tienen responsabilidad central  en la baja afluencia del agua aun cuando las presas y los ríos hace semanas tienen la suficiente capacidad para solventar cualquier emergencia, sobre todo la del consumo de agua humano.

Lo anterior significa una grave irresponsabilidad de toda la cadena de actores directos, y la necesidad profunda de que la administración del agua deje de estar en manos de grupos y de mafias que la controlan para intereses de unos cuantos.

Hoy el problema es más grave aún, porque ahora se están metiendo con los ciudadanos, con los hogares y con el primordial derecho humano del consumo de agua para la sobrevivencia en todos los aspectos de la vida cotidiana.

¡Ya basta! El gobierno federal, diputados y senadores, deben actuar con urgencia para cambiar de manera profunda el modelo de distribución del agua en el país y, de esa manera, terminar con las mafias que históricamente la han controlado a través de los llamados módulos de riego, mismos que hoy pretenden someter a la población reduciendo a su antojo el flujo del vital líquido para consumo humano.