Los reclamos y manifestaciones de rechazo a la instalación de la planta de amoniaco en Topolobampo recibieron como respuesta de la autoridad municipal, un “cerco” de policías que muchos consideraron como intento de intimidación.
Como si se tratara de enemigos o de invasores, los ciudadanos de varias comunidades y de Los Mochis que lo único que piden es respeto a su medio ambiente, fueron recibidos como sujetos peligrosos.
Y aunque después fueron atendidos por el secretario del ayuntamiento, Genaro García, la simple presencia policiaca como recepción deja mala parada a la autoridad municipal.
Sin embargo, más allá de la indignación que genera el hecho que sean los mismos gobernantes, principalmente los tres alcaldes del norte del estado (Ahome, El Fuerte y Guasave), quienes se han convertido en promotores del “Sí” al proyecto, lo importante es que cada vez más personas se manifiestan en contra.
Joel Ulises Pinzón, líder del colectivo “Aquí No”, reconoció que la marcha que se llevó a cabo el viernes 19 de noviembre en Los Mochis resultó mejor de lo que esperaban.
“Cada vez somos más, ojalá esto sirva para que los ciudadanos de Ahome observen la postura que tenemos como habitantes de Topolobampo, que se solidaricen con nosotros”, expresó.
Y es que desde el inicio se planteó que sería una manifestación tranquila, porque no se busca la confrontación, pero si dejar clara la postura de los habitantes del puerto, de varias comunidades aledañas al lugar donde se empezó a construir la planta y de la población de Los Mochis.
Algunas de las voces insistieron en que la empresa GPO se aferra en construir su planta en una zona donde son más los daños que los beneficios.
“No entienden que la gente no está en contra del progreso, si no del lugar donde se quiere construir”, apuntó una ciudadana.
“No queremos una fabrica de la muerte en la bahía de Ohuira, porque el daño se extendería a toda la costa del pacífico y hasta el alto golfo de California”, señaló otra persona.
Lamentablemente GPO sigue engañando a la gente y sigue tratando de comprar el voto a favor de la peligrosa inversión en el puerto.
Más Historias
“Japama está peor que nunca”; ni sus trabajadores se salvan de sus abusos
Hace falta mayor cultura del masaje, porque no todos tienen “final feliz”
Acusan a alcalde de negarse a pagar pensión a viudas de policías