¿Milagro o negligencia? Un bebé “revivió” cuando iba a ser sepultado

El bebé que nació prematuramente y que “revivió” ocho horas después de que fue declarado muerto en un hospital de Los Mochis, sigue luchando por su vida en el área de terapia intensiva del IMSS.

El pequeño, que nació a las 23 semanas de gestación en el Hospital Ginecopediátrico del IMSS, estaba a punto de ser sepultado cuando empezó a moverse y fue llevado de nuevo a un hospital.

Una de las abuelas insistió en verlo antes de ser llevado a sepultar en el ejido Mártires de Sinaloa, en el Valle del Carrizo, y fue en ese momento cuando se dieron cuenta que estaba vivo.

La madre, una enfermera de 39 años, ingresó al hospital el pasado 14 de julio, sin embargo, fue hasta el 18 de julio que se dio el “alumbramiento” de un niño que, según personal del IMSS, no tenía signos vitales.

Los padres fueron informados de la triste noticia y empezaron a correr los trámites para la entrega del cuerpo. Incluso, se dijo que la madre tuvo oportunidad de tener al bebé sobre su pecho, esperando tener una reacción positiva.

Fue ocho horas después cuando ocurrió lo que muchos consideran un “milagro”, porque el recién nacido “revivió” momentos antes de ser llevado al panteón para el último adiós.

Tras su reacción, primero fue llevado al hospital del Carrizo y más tarde lo trasladaron de nuevo al Ginecopediátrico del IMSS donde permanece bajo vigilancia médica.

Debido a su estado prematuro y a que hizo falta la atención que todo recién nacido requiere en sus primeras horas de vida, el bebé se encuentra delicado de salud en el área de terapia intensiva neonatales.

Mientras especialistas buscan una explicación a este extraño suceso, autoridades del IMSS anunciaron una investigación para determinar si hubo negligencia en el manejo del caso.

La delegada del IMSS en Sinaloa, Tania Clarissa Medina López, informó que se está dando puntual seguimiento a la situación del menor y que se integró un expediente para analizar el caso y saber qué fue lo que pasó.

“En este momento lo más importante es la salud del menor, que está estable a pesar de la inmadurez que tiene porque nació a las 23 semanas, cuando el embarazo es de 40 semanas”, puntualizó.

Acerca de los tiempos que transcurrieron en este caso, dijo que el nacimiento se registró a las 9:36 de la mañana y tras la declaratoria de su muerte, a las 2 de la tarde se entrega el cuerpo del bebé a la familia.

La funcionaria del Seguro Social confirmó que fue casi 8 horas después que el menor regresó con vida al hospital para ser internado de urgencia.

Tania Clarissa Medina reconoció que en los 26 años que tiene trabajando en el Seguro Social no le había tocado un caso similar, sin embargo, insistió en esperar el resultado de la investigación para tener certeza de lo que pasó.

Por su parte, el papá del recién nacido Luis Alfonso López aseguró que solo un milagro es lo que mantiene con vida a su hijo y reiteró su creencia de que el personal del Seguro Social no hizo bien su trabajo.