Rastreadoras: Un año más en la búsqueda entre angustia, dolor y llanto

Las Rastreadoras de Guasave celebraron el tercer aniversario de su colectivo en medio de la angustia y el dolor de tener un hijo desaparecido.

Quienes integran el grupo son madres de familia que se han unido para localizar a sus seres queridos, la mayoría de ellos víctimas de “levantones”, y a quienes buscan hasta por debajo de la tierra.

La celebración se llevó a cabo este fin de semana y tuvo como principal actividad “la marcha silenciosa por nuestros desaparecidos” que partió del monumento a la madre y concluyó frente a la Fiscalía de Justicia.

En la caminata, las integrantes del colectivo mostraban leyendas de “se busca” dedicadas a sus familiares, plasmadas con una fotografía en playeras o lonas y un número telefónico donde esperan recibir la llamada que los lleve a su paradero.

Joaquín Guadalupe Quiroz, Saúl Ernesto Rubio, Vidal Ornelas, Cruz Antonio Rivera, Uzziel Jacinto González, José Ulises Valdez, David Alfredo Beltrán, Alberto Javier Parra, son algunos de los nombres de desaparecidos que exhibieron por las calles de Guasave.

La marcha concluyó con un plantón frente a un improvisado mural con la imagen de quienes están siendo buscados desesperadamente por su familia.

“El llamado que les hacemos es que si saben dónde están nuestros hijos, que nos digan, que nos hagan una llamada, para ir por ellos. Nosotros no buscamos culpables, solo queremos a nuestros seres queridos”, coincidieron algunas de las Rastreadoras que se mantienen en la búsqueda y que aseguran no van a parar hasta encontrarlos.