Abogados advierten que intereses perversos intentan callar a periodistas

Intereses perversos intentan callar a los periodistas, desvirtuando su trabajo, alertó el presidente de la Federación de Abogados de Sinaloa -Fedasin-, José Luis Polo Palafox, al hacer pública su solidaridad con el periodista Felipe Guerrero Bojórquez.

Dijo que no se va a permitir que intereses ocultos y perversos de parte de políticos logren su propósito de callar a los periodistas por las irregularidades que están generando.

Indicó que la Fedasin se sumará con asesoría jurídica al caso de Felipe Guerrero, contra quien se desató una campaña “negra” para desprestigiarlo aparentemente ordenada desde el poder.

Polo Palafox reprobó también el caso del periodista Ramiro Cázarez quien fue denunciado por la síndica procuradora de Guasave. “Eso ya no se puede permitir”, puntualizó.

Entonces, ¿Quién sigue?, cuestionó Polo Palafox al afirmar que hay otros periodistas que también han sido atacados por su trabajo.

Aseguró que en Sinaloa se vienen cometiendo delitos cibernéticos con mucha frecuencia y el poder legislativo debe legislar en la materia, porque no solamente se cometen delitos, también se trasgreden honorabilidades públicas.

El dirigente de los abogados ofreció a Felipe Guerrero que especialistas en este tipo de situaciones coadyuven en el seguimiento jurídico de su caso hasta sus últimas consecuencias.

Polo Palafox envió un mensaje a la fiscal Sara Bruna Quiñónez para exigirle que haga valer la ley y cesen las agresiones arteras y perversas en contra de los periodistas.

“Aquí hay un acto cobarde desde el poder en contra del periodismo y cuando se afecta a un periodista, se afecta al orden público”, resaltó.

El también notario público reiteró su solidaridad a nombre de la Fedasin con el periodista Felipe Guerrero y aseguró que su caso será llevado hasta el final para que no quede atorado como muchas otras denuncias en la Fiscalía de Justicia.

El presidente de la Federación de Abogados concluyó que se tienen evidencias de que detrás de los ataques contra Felipe Guerrero está la mano de un poder publico y muy probablemente de un presidente municipal.